lunes, 25 de enero de 2010

Algunos mitos sobre el Adiestramiento Canino. M.Sc. David Peiró. Director FOGAUS Educación Animal.

Si me lo permiten, quisiera mediante este artículo desmitificar algunas afirmaciones que, en mi opinión, son incorrectas y que se dan con bastante frecuencia entre la población con respecto al adiestramiento canino.

Es bastante preocupante el poder comprobar cuántos mitos siguen circulando entre la población acerca de los perros. Ejemplo de ello puede ser que un perro atado toda su vida se vuelva más agresivo y defiende mejor el hogar (cómo va a hacerlo si está atado?), y todavía más agresivos si se les da chile o cebolla (tóxicos para los perros), o que dar bebidas alcohólicas a los chihuahuas desde cachorros les hace quedarse más pequeños de tamaño y por tanto es más fácil venderlos, que un perro que cuenta con un jardín amplio es suficiente para que viva toda su vida pues tiene suficiente campo (no olvidemos que son animales exploradores por excelencia y requieren de mucha estimulación sensorial. Esto significa que necesitan salir a pasear frecuentemente, oler las marcas de otros perros o interactuar con ellos, marcar territorio, etc.), o que a un cachorro es mejor destetarlo y separarlo de la madre antes del período normal de destete (no olvidemos que la mejor escuela canina en el mundo es la permanencia con la madre del cachorro y sus hermanos hasta no menos de los 2 meses de edad), o que es bueno castrar a las hembras agresivas para bajar su nivel de agresividad (gran error!, puesto que si la perra manifiesta un tipo de agresividad por dominancia, o por protección de recursos, o territorial, etc. lo único que se conseguiría es el efecto contrario, es decir, que habría un incremento de hormonas masculinas y un descenso de las femeninas por lo que los niveles de agresividad aumentarían!!!) etc.

Por mi experiencia en el mundo de la educación canina, he comprobado que también existen demasiados mitos alrededor de cómo se debe educar a un perro. Entre ellos, y como Talón de Aquiles en la batalla que los educadores caninos sostenemos, es la extendida y errónea concepción antropomórfica que se tiene con los perros, la tendencia a humanizarlos y a pensar que ellos deben entender, responder y adaptarse a nuestros patrones de conducta humanos. Pero este es un tema del que merecería escribirse otros muchos artículos.

Otro ejemplo de es la afirmación que tan frecuentemente escucho sobre que al perro debemos educarlo mediante el uso la fuerza y la violencia para así someterlo a nosotros porque el perro es un “animal” y no entiende de otra forma que no sea por la fuerza. Este frecuente comentario surge, en la mayoría de los casos, por el desconocimiento por parte de muchas personas de que existen otro tipo de métodos de entrenamiento que son mucho más amigables y respetuosos. Las técnicas que NO utilizan violencia y fuerza como medio educativo son mucho más efectivas y perdurables en el tiempo puesto que el animal siempre estará dispuesto a practicar con alegría y satisfacción los ejercicios de obediencia que le son enseñados porque vera en ellos un “juego” y una mayor cercanía y vínculo con el propietario.

Recientemente un buen amigo me comentaba que escuchó algunos propietarios afirmar que cuanto más cara sea un escuela canina y cuanto más tiempo esté en ella, mejor aprendizaje recibirá el perro. Y es que ni el dinero ni el tiempo son factores que condicionen que un adiestramiento sea de mayor o menor calidad, sino que es el entrenador, el vínculo que éste pueda desarrollar con el perro, el saber encontrar qué le motiva al animal para que responda con eficacia y el método usado los que finalmente deciden un buen o mal adiestramiento y la estabilidad emocional de la mascota. Hemos de pensar que la sanidad o la educación canina no es solo derecho de aquellas personas que tienen alta solvencia económica, sino que también se debe ayudar a aquellas que no la tengan y que quieran lo mejor para su perro aunque eso les cueste quitarse su propio alimento.

Por tanto, así como pienso que un veterinario, por ética profesional, en determinadas ocasiones justificadas debería dar su servicios de forma gratuita a propietarios que no tengan el suficiente poder económico para sanar a su mascota o que la hayan adoptado de la calle en condiciones críticas , en el ámbito de la educación canina sucede lo mismo. La educación de un perro es una forma de ayudar al animal y al propietario, de darles mayor calidad de vida a ambos en la mutua convivencia y de reforzar un vínculo sano entre ellos. Los precios deben ser accesibles para todos puesto que independientemente de la solvencia económica de una persona, sus perros merecen la mejor atención y calidad de vida. No es ético reservar la educación canina exclusivamente para las altas clases sociales.

Por otro lado, tampoco es una cuestión de que cuanto más tiempo pase un perro en una escuela más aprenderá. De nuevo, no se trata de tiempo, sino de la calidad y dedicación en la enseñanza. El uso de un método de adiestramiento correcto en positivo, así como de un entrenador experimentado respetuoso con los animales, que dedique gran parte de su tiempo en brindarle atención diaria y especializada y en donde el animal no pase a ser un “número más” en la escuela en donde va a ocupar la jaula “# x” , es el factor decisivo en la calidad del entrenamiento.

Otro comentario frecuente que me comentan los propietarios y entrenadores es que no se debe adiestrar a un perro hasta después de los 6 u 8 meses de edad. Y yo me pregunto por el origen de este comentario tan habitual.

Los perros pasan por un período crítico de socialización o impronta, que comprende de las 3 semanas de vida del animal a los tres meses. Hasta los 5 meses, el perro va a seguir teniendo una mayor capacidad de asimilación de todos aquellos estímulos que le rodean, estímulos que condicionarán su comportamiento futuro. Es por ello que mediante el uso de técnicas correctas de educación, esta etapa de la vida del perro es la mejor para implementarle nuevas conductas aceptables por nosotros, entre ellas la enseñanza de órdenes de obediencia básica.

Busquemos profesionales cuyas técnicas de enseñanza vaya siempre acompañadas a mejorar la vida de estos maravillosos y cercanos animales.
Gracias!

Preguntas Frecuentes sobre Adiestraminto y Educación Canina. M.Sc. David Peiró. Director FOGAUS Educación Animal

Cuánto tiempo deben durar las clases de adiestramiento de mi perro?

Tanto la modalidad de adiestramiento en una escuela o a domicilio, si el adiestramiento se realiza con métodos positivos y la mascota no presenta problemas de conducta que hayan de ser tratados antes o durante el proceso de aprendizaje (como agresividad, hiperactividad, déficit atencional muy marcado, patologías que deben ser tratadas mediante el uso de la ciencia de la etología clínica veterinaria o psiquiatría animal) ni problemas médicos, el entrenamiento de un perro no tiene por qué durar más de dos semanas a lo sumo. Por ello, un adiestramiento que dure más que ese tiempo, a no ser que el perro presente patologías de conducta evidentes, en mi opinión, no estará justificado.

Qué método es el mejor para usar en el adiestramiento de mi mascota?

Es fácil y de suma importancia que usted perciba y analice la actitud del perro al darle una orden después de que le hayan dado un adiestramiento. Si el comando u orden es cumplido con manifestaciones de alegría corporales por parte de su mascota tales como mover la cola de un lado a otro, energía, predisposición, etc,. será señal de que se ha realizado un adiestramiento con reforzamiento positivo en el cual el perro se ha divertido, y donde no ha habido maltrato físico ni psicológico. Si en cambio, el perro obedece la orden pero lo hace con signos de miedo, como la cola entre las patas, orejas caídas, escape, etc. significará que se le ha dado una educación con castigos e incluso con violencia.

Por ello, siempre debemos asegurarnos de que la escuela o la persona que vaya a entrenar al perro lo haga mediante REFORZAMIENTOS POSITIVOS y con base científica. Si no es así, el perro habrá recibido u adiestramiento mediante el uso de la fuerza.

A continuación, veamos los 4 tipos de métodos o técnicas de aprendizaje generales usados habitualmente en el adiestramiento, de los cuales sólo el método con refuerzo positivo es el que debe ser usado.

- Adiestramiento con REFUERZO POSITIVO: Este es el método que se debe usar en la educación de un animal. Consiste en usar reforzadores que le gusten a nuestra mascota como puede ser comida, caricias, juego, atención, etc.,usando el condicionamiento clásico y el condicionamiento operante en la educación, de tal forma que cuando le demos una orden al perro y este la cumpla sea premiado. En caso de que no la cumpla se le corregirá vocalmente (modulando la voz según el nivel de corrección requerido. Nunca la corrección debe ser mayor que la falta cometida) o se le ignorará, por lo que el perro siempre buscará obedecer puesto que es así como conseguirá aquello que desea.

Este método es el único que usamos en FOGAUS. Es por esta razón que los perros disfrutan mucho durante su educación, el proceso de aprendizaje se acelera considerablemente y lo aprendido se hace mucho más perdurable en el tiempo.

- Adiestramiento con REFUERZO NEGATIVO: Técnica desgraciadamente muy usada por muchos “adiestradores” y es, junto con los siguientes que exponemos, un pésimo y cruel sistema de enseñanza. Al perro se le somete a algo malo para él (como un collar eléctrico) que no se le retira hasta que cumple la orden. En definitiva, el perro ha de obedecer si quiere que le quiten el dolor al que el entrenador le está sometiendo.

- Adiestramiento con CASTIGO POSITIVO: Es el adiestramiento más clásico y también el más usado. Consiste en que si el perro no obedece una orden, es castigado, normalmente mediante el uso de la violencia.

- Adiestramiento mediante el CASTIGO NEGATIVO: si el perro no obedece la orden, se le quita aquello que posee en ese momento y que le gusta. Supone un adiestramiento un tanto traumático para el animal y es un método que personalmente no recomiendo por las negativas consecuencias emocionales que esta técnica supone para el animal.

Cuál es la edad más conveniente para entrenar a un perro?

Cualquier edad es buena para ello. En nuestro caso como personas, la edad no es importante si a cambio de realizar una conducta nos dan un premio. Lo mismo ocurre con los perros, ya que ellos habrán de realizar la acción que queramos si es que quieren conseguir aquello que desean. Lo importante es la motivación del perro.

En mi opinión, la mejor edad es la de los cachorros, ya que están en un período de gran asimilación y cuya educación positiva les marcará su comportamiento adecuado el resto de su vida. La diferencia con el entrenamiento con perros adultos es que, sencillamente, en estos se habrá de trabajar un poco más para extinguirles conductas inadecuadas aprendidas a lo largo de su vida e instaurar unas nuevas en ellos. Desde los 2 meses de edad (tiempo medio de destete natural y necesaria permanencia del cachorro con su madre y hermanos) hasta la vejez del animal, el adiestramiento será efectivo.

Nota: Sí debemos tener especial atención a dos aspectos en la educación de un cachorro. Por un lado, el adiestramiento debe ser muy respetuoso con él ya que, como se ha explicado anteriormente, están en pleno desarrollo neuronal y por tanto tienen una edad muy crítica en el aprendizaje. El uso de un método duro con ellos o la violencia supondrá traumar al animal y, por tanto, el más que probable desarrollo de patologías de conducta en su vida futura.

Por otro lado, el hecho de que en algunas escuelas para el adiestramiento básico el perro esté cuatro o más semanas en una jaula, solo sacado para su entrenamiento, implica que este va a pasar ese período tan crítico de socialización encerrado, período en el que deberíamos proporcionarle la mayor estimulación posible como socializar con otros perros, la ciudad, el campo, los camiones, las tormentas, las personas, la familia, etc., ya que si el perro no conoce estos estímulos a esa edad, les tendrá miedo o se mostrará agresivo en su futuro como adulto. Debemos socializar y habituar a los cachorros al mayor número de estímulos que podamos para que no manifieste comportamientos anómalos contra estos en su desarrollo. La escuela a la que envíe a su perro debe de dar especial atención a los factores psicológicos durante la educación del cachorro, no solo a un mero adiestramiento.

Qué conseguiremos con el adiestramiento?

En FOGAUS consideramos el adiestramiento como una terapia más de conducta en el proceso de educación de nuestra mascota. El adiestramiento debe ir acompañado de la educación del propietario ya que si éste no sabe comprender la conducta de su perro, de nada valdrá tenerlo adiestrado.

Por ello estamos convencidos de la necesidad de la educación de los dueños, y esta la realizamos a través del proceso contratado con nosotros.

Un adiestramiento correcto hará, efectivamente, que usted tenga control físico del animal. Pero este deberá ir acompañado de una nueva actitud por parte del dueño con el perro de tal forma que usted actúe como “líder de manada” y consiga una correcta y fuerte viculación. Automáticamente el perro se ubica en su posición en la escala jerárquica de su grupo social o “manada” que, en este caso serán los miembros de su familia, situándose por debajo de todos ellos. Esto hará que el perro se muestre mucho más obediente, más tranquilo, más seguro y empezará a no mostrar ya signos de ansiedad.

En definitiva, el adiestramiento cumple una función esencial que es la de transmitir al perro el mensaje de superioridad con respecto a él, quién manda en definitiva, pero sin usar medios de sometimiento físicos por la fuerza. El perro le “agradecerá” el poder tener un jefe (o jefa) seguro de sí mismo, que le proteja y guíe en su vida ya que usted estará actuando según los patrones de conducta de una manada natural, haciendo el papel de guía del perro. Y eso es lo que necesitan nuestros perros, confiar en un líder, y que sus compañeros del grupo social le traten como tal y no lo confundan cuando pretendemos que actúen como humanos, pues ellos nunca tendrán el suficiente nivel psicológico para entendernos y por ende les crearemos problemas de conducta debidos a la inadaptabilidad al grupo.

Hace falta seguir adiestrando al perro una vez que ya ha sido entrenado?

Si. El aprendizaje de un perro, así como el nuestro, dura toda la vida. El perro necesita que el adiestramiento tenga un seguimiento. Es conveniente hacer dos o tres sesiones de trabajo al día de no más de 10 minutos, como se ha explicado en el apartado de “Duración de sesiones”.

Con el adiestramiento solucionaré problemas como por ejemplo el que no se orine dentro de la casa, que no se escape, que no destroce los muebles o que no ladre tanto?

El proceso educativo de un perro no se hace en un día. Requiere de una atención diaria y dedicación, pues no podemos olvidar que ellos no tienen el concepto de bien y de mal definidos, sino que debemos ser nosotros los que guiemos al perro en este sentido. Ladrar, orinarse dentro de la casa, destrozar muebles, hacer agujeros en el zacate o escaparse (“salir a explorar”) entre otras son conductas normales en los cánidos, por lo que debemos ensenarles con paciencia cuáles son las normas de conducta que deben seguir en la convivencia con nosotros, al igual que haríamos con nuestros hijos.

Con el adiestramiento podremos corregir esas conductas ya que a través de el conseguiremos el respeto de su mascota y que las nuevas normas que le ensene como eliminar en el lugar adecuado, no escaparse, etc, después de ensenárselas las respete.

Es por ello que, mediante el proceso educativo al propietario que llevamos a cabo en FOGAUS, usted podrá poner en práctica las instrucciones o “tips” que le demos para corregir esos problemas y no necesitará de la presencia del instructor.

Mejorará el adiestramiento la calidad de vida de mi perro?

Por supuesto!. El adiestramiento será un juego y un premio en sí mismo para su perro si es que éste ha sido efectuado con los métodos positivos correctos (si su perro ha sido ensenado con técnicas que incluyen la violencia, maltrato psicológico, etc., el adiestramiento supondrá para el perro un castigo y la eficacia de su obediencia disminuirá con el tiempo). El adiestramiento hará que el perro se divierta, desarrolle sus capacidades motrices, psicológicas y sensoriales mientras está motivado para agradarnos y conseguir un premio.

Debemos siempre proporcionar al perro la posibilidad de que desarrolle un comportamiento lo más natural posible a su especie. En la naturaleza, tanto la atención del líder de manada, como la búsqueda de los recursos, etc. requieren de un esfuerzo. Y en eso consiste el adiestramiento, en que el perro se esfuerce en conseguir lo que quiere teniendo así un comportamiento natural y por tanto equilibrando su estado psicológico.

Qué hago si mi perro “olvida” las órdenes?

El adiestramiento que brindamos en FOGAUS incluye el seguimiento conductual de su perro a lo largo de la vida de éste. Esto significa que se puede poner en contacto con nosotros ante cualquier problema a nivel de comportamiento que le surja con su mascota. Además, incluye también el que nos pueda traer al perro a la escuela de forma gratuita y en la misma visita reforzaremos alguna orden que no cumpla bien, ya sea porque no se le ha dado el correcto seguimiento o porque no se ha sabido proceder con los comandos correctamente por parte del propietario.

Una de las características de la técnica de aprendizaje que usamos en FOGAUS en la educación canina es la técnica denominada de “Sobreaprendizaje”, de tal forma que por sucesivas repeticiones del comando ensenado el perro responde automáticamente a estas. Esto supone que si se está durante mucho tiempo sin entrenarlo, este recuperará la obediencia de los comandos en escasos segundos (a este cualidad del aprendizaje se le llama “Recuperación Espontánea)

Debemos todos los miembros de la familia realizar los ejercicios de adiestramiento con el perro?

Es lo más conveniente. Los miembros de su familia han pasado, desde que trajo a su perro a casa, a ser los integrantes de lo que él considera su propia “manada”. Para tener un perro equilibrado, como ya hemos comentado con anterioridad, debemos proporcionales un ambiente lo más natural y cercano al de su especie. Esto significa el comportarnos con el perro según los patrones de conducta que manifestaría un líder de grupo. Por ello, si solo algunos miembros de la familia siguen las normas de conducta canina con el perro y otros no, no haremos más que confundirle lo que implicaría desórdenes de conducta.

Es por todo ello que lo más conveniente es que todos, incluidos los niños de la casa si los hubiere, coordinen el tratamiento que se le va a dar a su fiel mascota. Todos deberían aprender a dar las órdenes necesarias al perro, y, muy importante, que todos manejen sus recursos, estos es, que todos los componentes de la familia, así como trabajadores de la casa, etc. sean los que le den comida al animal (en perros agresivos, o en aquellos que grunan o muestren algún tipo de comportamiento agresivo cuando algún miembro de la familia se la acerca a su comida, por favor, consúltenlo con nosotros antes de proceder a darle comida. La prevención de accidentes es lo más importante y es posible que el perro esté desarrollando un desorden de conducta denominado agresividad por dominancia u otro tipo patología (ver mas sobre desórdenes de comportamiento en el link ”libros y artículos”)

De esa forma, el perro entenderá que es el último en rango en la estructura social creada en la familia, y será un perro obediente con todos ustedes.

Cuánto deben durar las sesiones de adiestramiento que debemos darle al perro una vez que ya está adiestrado?

Al perro no se le debe someter a sesiones de entrenamiento largas, ya que se puede aburrir y crear en él una aversión hacia este.

En cambio, las sesiones deben ser cortas y divertidas, donde no solo haya órdenes que el perro debe obedecer sino que debemos combinarlas con pequenos espacios de ocio con juego, caricias, etc.


M.Sc. David Peiró.
Etólogo Clínico Veterinario (especialista en Comportamiento Animal). Universidad Complutense de Madrid
Adiestrador Canino Profesional

Agresividad instrumentalizada, predatoria e intraespecífica en una hembra de Rottweiler+ SRD. Eugenia Fait

Nombre: Ma-Ji

Edad: 5años

Raza: Mezcla Rottweiler + SRD

Descripción:

Ma-Ji es una perra de cinco años de edad, dominante, que vive con 7 perros, 6 de los cuales son hembras y un macho. Y su dueña. En una zona rural, donde convive a la vez otras especies, iguanas, zorrillos, armadillos, etc.

A la manada se han ido sumando miembros a través de los años. En un principio era conformada por una pastor belga, el macho actual, y luego Ma-Ji quien fue hallada con no más de dos meses de edad. En ese momento era agredida por otra persona con una manguera. Razón por la cual la propietaria actual decidió llevársela a su casa.
La propietaria admite que utilizó métodos de castigo al tratar de erradicar comportamientos indeseados de su perra, siendo ésta cachorra.

Presenció la muerte de una Pastor Belga, con la que convivía, quien fue asesinada con veneno. Dicha perra, a la hora de su muerte, contaba con cachorros, a los que Ma-Ji terminó de criar inclusive produciendo leche. Sin embargo se comió a uno de ellos.

Luego llegaron, en forma intermitente, las otras tres hembras con las que se relaciona bien. Hace unos seis meses, la propietaria intentó introducir a la manada a las tres hembras con las que Ma-Ji NO se lleva, con resultados muy negativos, pues trató de matar a las 3 en diferentes ocasiones.

La propietaria tuvo que dividir el patio en dos para que evitar peleas y muertes.

Con anterioridad ha tenido episodios agresivos intraespecíficos con miembros fuera de su manada sin provocación por parte del otro animal, terminando en algunos casos en muerte.
Cuando era cachorra la propietaria le llevaba ositos de peluche para que la perra jugara, y los destruyera. Ma-Ji dormía con su propietaria y era alimentada junto con ella.

El comportamiento agresivo, fuera de la casa, fue estimulado por la propietaria, incluyendo la palabra “Kämphen” para que la perra atacara a petición. A veces, cuando se le da la orden de parar, “Genug”, ella detiene el ataque, sin embargo en muchas ocasiones, hace caso omiso de su propietaria. Dichos comandos fueron impartidos por la necesidad que sintió la propietaria de proteger al macho y a ella misma, pues, a la fecha, él es atacado por perros callejeros o con propietarios irresponsables y este al ser sumamente dócil, siempre decide correr antes de pelear y en más de una ocasión quien le salvó la vida fue Ma-Ji. Si la perra es detenida, ya sea bajo una orden o físicamente antes del momento crítico, se apacigua. Si pasa el momento crítico, el ataque es a muerte.

También caza animales pequeños como gatos, iguanas u otros perros. Canibalismo presente. En el ataque presenta grandes niveles de excitación y es casi imposible separarla de la presa.
La propietaria dice no tener problema con la depredación de su perra, sin embargo quiere ser capaz de detener un ataque indeseado.

Diagnóstico Diferencial:

• Agresión Jerárquica Intra específica o Inter específica

Esta agresión se presenta entre perros (agresión jerárquica intra-específica) y entre perros y humanos (agresión jerárquica inter-específica).

Esta agresión es llamada también de competencia, de dominancia. Se da en situaciones de competencia por recursos, espacio y contacto. Se atribuyen a los esteroides un papel importante en la presentación de esta agresión durante la pubertad. En el animal llegado a la edad adulta ya no juegan más que un papel secundario razón por la cual la castración no permitirá ejercer un control sobre estas agresiones.

Esta agresión se presenta con tres fases:

- Intimidación: se observa pilo-erección, orejas paradas, cola parada, miembros rígidos con andar “mecánico”, belfos retraídos, pupilas en miosis con el canto externo dirigido hacia las orejas, mientras que el perro emite gruñidos.

- Ataque: tiene por objeto la sumisión del adversario, pudiendo ser un pinchazo, una mordida breve, o el perro carga a su adversario para agarrarlo de la piel de la parte dorsal o ventral del cuello, y del pecho, los miembros anteriores. Ya teniendo el control, el perro ejerce una tracción que tiene por efecto hacer caer a su adversario de lado o sobre el dorso. Lo mantiene allí o lo intenta hasta que el adversario adopta una postura de sumisión.

- Apaciguamiento: el “perro vencedor” va a mordisquear al vencido arriba de la cabeza o ponerle la pata a la altura de la cruz y/o en ocasiones realiza la monta. Para finalmente alejarse.
Ma-Ji no presenta la fase de intimidación si tiene el espacio para atacar. Y le es irrelevante si el otro perro asume posición de sumisión.

No presenta agresión hacia humanos injustificada, sin embargo si se le provoca o se ataca a la dueña, el ataque de la perra es inminente.

• Agresión territorial

Se presentan en ocasión de una intrusión, son agresiones que tienen por objeto proteger al territorio.

En la agresión territorial el perro va al encuentro del intruso ladrando y gruñendo, el pelo de punta, la cola en alto, las orejas paradas. Fija a su adversario parándose. Si el intruso sigue, el defensor rasca el suelo con sus cuatro miembros y gruñe haciéndole frente. El intruso es llevado afuera mediante embestidas y pinchazos. Al salir del perímetro el intruso, el perro va a ladrar con fuerza, mueve la cola la cual se queda parada.

Ma-Ji ataca dentro y fuera de su territorio, sin alertas.

• Disocialización Primaria

El animal al ser separado muy tempranamente de la madre y los hermanos, no adquiere el lenguaje corporal ni auditivo necesario para la correcta sociabilización con los miembros de su especie, sin reconocer así las formas de sumisión o alerta dadas por otros perros, lo que puede provocar ataques desmedidos.

Ma-Ji tiene “peleas ritual” con miembros de su manada, y ha parado ataques ante posturas de sumisión. Sede la comida ante el macho.

La perra presenta una Agresión por Instrumentalización, en donde fue enseñada a atacar, conjuntamente con un Problema de Jerarquización Inter específico, no está claro su lugar ante la propietaria, por lo que a veces si obedece y a veces no.

También existe Agresión Predatoria, en donde la perra ha aprendido y enseñado al resto de la manada a cazar presas pequeñas.

Posible Componente Orgánico por los niveles de agresión en los ataques y la falta de control del animal. Se recomienda realizar todas las pruebas veterinarias posibles para descartar la opción.

En Costa Rica solo se cuenta con la posibilidad de realizar las de Tiroidales, de T4 y TSH


Valoración de Riesgo:

Es un animal de alto riesgo pues ha matado ya con anterioridad.

Se debe utilizar el bozal y debe ser entrenada por la dueña.

Tratamiento:

- Educación de la Propietaria
- Es necesario que la propietaria entienda las pautas a seguir para la recuperación de Ma-Ji

- Prevención
- Utilización de bozal
- Collar de presión
- Alejarla de las perras en conflicto

- Modificación de Conducta

- Adiestramiento en Obediencia Básica Profesional

Con lo que la línea jerárquica entre la propietaria y la perra quedará claramente marcada.

- El animal obedecerá siempre al comando.

- Re-Socialización Dirigida

- Aunque no existen componentes claros de una Disocialización Primaria, es importante la Re-socialización para la posible agregación pacífica de miembros a la manada.

- Farmacológica:

- Resultado de Pruebas Veterinarias:

Prueba de Tiroides: T4Libre 1.93 ng/dl (Dentro del Rango Normal)
Colesterol Total: 251 mg/dl (Dentro del Rango Normal)
Nitrógeno Ureico 15.4 mg/dl (Dentro del Rango Normal)
Creatinina 1,3 mg/dl (Dentro del Rango Normal)
AlaninaAminoTransferasa 59 U/L (Dentro del Rango Normal)
AspartatoAminoTransferasa 38 U/L (Dentro del Rango Normal)

(Dr. Juan Carlos Fallas Muñoz. Clínicas PetCafé)

- Fluoxetina, re captador de la serotonina. 20mg diarios.
Así el animal podrá tener autocontrol y no exceder el ataque.

Se debe dar a entender a todas las hembras de la manada que Ma-Ji es la dominante, esto por medio del dar de los premios, que debe ser en orden jerárquico, así como el dar de la comida y la asignación de sitios para dormir.


Seguimiento:

Después de la primera consulta con el especialista, la propietaria de Ma-Ji no le permite más dormir con ella, elimina las “dadas de comida del plato”, y acostumbra a su perra al bozal.

Conjuntamente toma un curso de entrenamiento canino y empieza a entrenar a Ma-Ji en obediencia básica.

Elimina por completo los comandos de pelea, y en cambio de poner a la perra a pelear si se da un conflicto con otro perro en la calle, decide salir con un “pepper spray” y responder ella ante cualquier ataque.

Ma-Ji es medicada con tratamientos naturales y con fluoxetina.

Ma-Ji duerme en un colchón al lado de la propietaria y las tres hembras “no aceptadas” en la
cocina.


Pronóstico:

Favorable. Ma-Ji ha dejado de prestar importancia a las tres hembras, no se enfada tan rápidamente como antes y aprende los comandos con facilidad.




Eugenia Fait Shaw
Email: zurky@care2.com / outreia@care2.com

Alumna Curso de Adiestrador y Terapeuta del Comportamiento Canino. 3 Edición.



miércoles, 20 de enero de 2010

Agresivdad por Dominancia en un Yorkshire Terrier

Historia:

Casan es un Yorkie de aproximadamente 5 años y medio, sin castrar. Su propietario es la Sra. Olga Marta viven en una zona residencial, y es la única persona que vive en la casa, pero frecuentemente hay visitas, como sus hijos, nietos, la empleada, entre otros, que se quedan gran parte del día.

Casan fue adquirido en un criadero de Yorkies en San José a los 2 meses de edad, y se eligió simplemente por ser el que tenía el pelo más bonito. Originalmente se compro como regalo para sus nietas, Casan en un principio vivió con ellas , niñas de 6 y 9 años, los papas y la empleada, pero después de 2 años , Casan tuvo que ser regalado a la Sra. Olga ya que por indicaciones medicas la mama no podía tener mascotas porque esperaba un nuevo bebe.

Casan se adapto muy bien a su nuevo hogar, pues veía a sus antiguos dueños con frecuencia, pero acepto muy bien su nuevo amo y hogar. El lugar donde vive actualmente es una casa amplia con un poco de patio en la parte de atrás, donde Casan puede salir a hacer sus necesidades, el tiene acceso a todas las áreas de la casa, la forma de alimentarlo es ponerle la comida por las mañanas y se le deja ahí para que coma cuando él quiera, en cuanto al lugar donde descansa, el se duerme de día en los sillones y de noche en la cama principal, no sale a pasear, se puede decir que Casan está en casa el 100% del día.

Los problemas de Casan empezaron en su nueva casa, el comenzó a orinar por todos lados pequeñas cantidades marcando el territorio, no lo hace en ausencia del propietario más bien lo hace a todas horas y tan pronto como se ponga algún adorno o mueble nuevo,. en cuanto a la defecación nunca lo hace adentro, el conoce muy bien cuál es el área permitida para orinar y defecar, mas sin embargo no deja de hacer marcaje por todos lados dentro de la casa. Por otro lado, otro de los problemas es su agresividad al molestarlo cuando duerme y principalmente al acercarse a la cama cuando él está durmiendo, el se exalta demasiado y se porta agresivo, esta actitud es incluso con su propietaria quien ya ha sido mordida por él, la mordida fue un mordisco controlado, y su agresividad es ofensiva.


Diagnostico Diferencial:

A continuación se realiza un diagnostico diferencial con el fin de descartar otros posibles problemas que el animal pueda tener, se pretende llegar a un diagnostico concreto que facilite la aplicación de un tratamiento.

No se realizaron pruebas de T4 y TSH para descartar problemas orgánicos, solo se tiene como dato que hace aproximadamente 3 meses Casan fue al veterinario por un problema en un ojo, y en la revisión y observación que le dio, el perro presenta parámetros normales. Así que partiremos de la suposición de que el problema de Casan no es orgánico.

Se descartó que el problema de Casan sea una disocialización primaria, ya que estuvo con su madre hasta los 2 meses, además de que no presenta las actitudes características de este problema; el juega perfecto con los niños, y controla su mordida cuando juega con ellos, la agresividad que el presenta es cuando alguien se acerca cuando esta en el sillón o en la cama, en estas situaciones él presenta la secuencia de ataque (amenaza, ataque y apaciguamiento) de forma correcta, lo que demuestra que su socialización en sus primeros meses fue la correcta, por lo que este problema es descartado.

Por otro lado, una de las características principales de un perro con problemas de ansiedad por separación es orinar y defecar cuando el propietario se va, aun cuando Casan sí orina por todos lados de la casa, la cantidad de su orina nos indica claramente que es por marcaje de territorio, además no lo hace en la ausencia del propietario sino más bien ya sea que esté presente o no, y en cuanto a las otras características de ansiedad por separación como son aullido excesivo y destrucción de objetos o muebles, Casan no los presenta, el se mantiene tranquilo cuando el propietario está por salir, por lo que descartamos esta patología.

Hablando de agresividad por territorio en el caso de Casan podría presentar esta patología ya que él es agresivo cuando se acercan al lugar donde él está descansando (cama y sillón), sin embargo permite perfectamente que se le acerquen cuando come, tanto su amo, niños y extraños, con personas desconocidas, él es desconfiado al principio pero luego de un rato permite que se le toque y acaricie sin ningún problema además de portarse muy amigable. Una de las características principales de esta patología es que el perro solo agrede a extraños, y en esta ocasión Casan no solo agrede a extraños si no que también agrede a su amo y a personas que conoce, por lo que descartaremos también esta patología.

La agresividad por irritación o miedo también es descartada por contexto y por postura corporal, ya que Casan en su agresividad, presenta bien la secuencia de ataque, y se queda tranquilo después de agredir.

Y finalmente hablando de la agresividad por dominancia, Casan presenta la mayoría de las características como: agresividad hacia su amo, agresividad al acercarse a su lugar de descanso, agresividad ofensiva, gruñidos al bañarlo o castigarlo, monta objetos y personas, orina por toda la casa y en cualquier objeto nuevo que se presente en el entorno que él considera como su territorio, y su orina siempre es poca solo lo hace a modo de marcaje de territorio, por lo tanto, por todas estas características anteriores que el perro presenta, determinamos que el problema de Casan es una patología de Agresividad por Dominancia.

Valoración de Riesgo:

Antes de establecer el tratamiento que se le aplicará al animal, primero debemos valorar el riesgo que se puede correr al tener un perro con problemas de dominancia en casa.
Aun cuando Casan solamente pesa alrededor de 3 kilos y es un perrito pequeño, debemos recordar que si han existido agresiones hacia su amo, y que aun cuando no ha mordido a los niños pequeños si ha demostrado agresividad hacia ellos al ser molestado en cama y sillón, las agresiones que Casan ha mostrado no han sido agresiones de gravedad, pero no debemos descartar que las agresiones futuras lo sean.
Por ultimo debemos hacerle saber al propietario, que el tratamiento no garantiza la completa solución del problema, ya que estamos tratando con seres vivos en donde muchos de los problemas de conducta que presentan, son comportamientos propios del origen de su especie, en el caso del perro, sus ancestros los lobos nos dicen el porqué de estos comportamientos, al domesticar al perro muchas de sus conductas heredadas por sus antepasados no son aceptables para los humanos y es ahí donde los problemas empiezan; sin embargo con la aplicación y el buen seguimiento de un tratamiento, sumado a la cooperación del propietario, el resultado puede ser muy favorable.

Tratamiento:

Como tratamiento, primero que nada tomaremos medidas preventivas para que las agresiones no se presenten hacia los niños ya que ellos pueden ser los más afectados, aunque Casan es pequeño, en los niños podría causar alguna herida mayor, así que evitaremos la aproximación de los niños en los momentos en que el perro desencadena la agresividad, si el problema se hace más grave se debe considerar el uso de un bozal.
El protocolo del tratamiento, consta de: modificación de la conducta, modificación del ambiente y tratamiento farmacológico o quirúrgico.

Modificación de conducta:

• Someteremos al animal a un adiestramiento en obediencia básica, con el fin de controlarlo mejor en el momento de sus agresiones. El adiestramiento nos permite el mejor manejo del animal, ya que el aprende a seguir ordenes, y en los perros, sobre todos los que tienden a ser dominantes, es importante enseñarles esto, para que el perro aprenda quien es el líder y disminuya sus comportamientos dominantes.
• Protocolo “nada es gratis” de ahora en adelante si el perro quiere algo, tendrá que ganárselo, ya sea la comida, un juguete, atención del amo etc. Obedeciendo una orden él podrá obtener lo que quiere, así reforzaremos la autoridad del amo hacia su perro.
• Reforzaremos las conductas de sumisión, con una caricia o con premios, y por el contrario ignoraremos totalmente cualquier comportamiento dominante, ni siquiera para castigar, pues el castigo solo es un refuerzo más de esta conducta.

Modificación del ambiente:

• Tendremos control sobre sus recursos, la comida se le dará 2 veces al día a determinada hora, obedeciendo una orden antes de dársela, y el plato de comida se le será retirado después de unos 15 min, sin importar si comió o no.
• También controlaremos sus áreas de descanso, sobre todo las áreas donde él se muestra más agresivo, además, no se le permitirán comportamientos que aumenten su dominancia, como dormir en la cama principal, pondremos su cama en el lugar menos importante de la casa, no le permitiremos subirse encima de las personas, o de los sillones, etc.
• Se recomienda sacar al perro a pasear, aun cuando la raza de Casan es una raza que no necesita grandes cantidades de ejercicio, el perro pasa todo el día en casa sin tener ningún contacto con el exterior, por lo tanto se recomienda sacarlo a pasear, no por mucho tiempo pero si el necesario para que el pueda ejercitarse un poco y pueda orinar y defecar, el paseo ayudara también a que el perro libere un poco de la energía y estrés que acumula al estar en casa todo el día.
• Ignoraremos sus llamadas de atención y solo se le dará atención cuando el dueño lo desee y ante conductas deseadas.
• Realizaremos un contracondicionamiento, para que Casan se distraiga con algo más al momento de empezar su comportamiento agresivo y desensibilizarlo poco a poco, premiando cuando su conducta sea tranquila.



Tratamiento farmacológico o quirúrgico.

• En el caso particular de Casan no utilizaremos tratamientos farmacológicos, si bien es cierto que es agresivo en determinadas situaciones, su agresividad y el riesgo de su agresividad no son extremos, se realizara la modificación del ambiente y de la conducta, y en dado caso que el animal no mejore, podremos recomendar un tratamiento farmacológico recomendado por un veterinario, o bien la castración.

Gabriela Arizón
Alumna 3 Edición Curso de Adiestrador y Terapeuta del Comportamiento Canino. FOGAUS 2010.